Gran parte de la población mundial está actualmente bajo cuarentena debido a la pandemia del COVID-19. Eso significa confinamiento y, a su vez, que las personas, sin posibilidad de salir de sus casas, están guardando en el refrigerador todo tipo de comidas para conservarlas lo más posible. Ahora bien, ¿es eso correcto?…

Frimaca, empresa especializada en congelación y refrigeración industrial presidida por Mauro Libi, tiene varias respuestas a esa interrogante, y lo hace basándose en su amplio conocimiento de la cadena de frío y, además, en las recientes directrices expuestas por el Servicio de Inspección y Seguridad Alimentaria de Estados Unidos.

Congelarlo todo… ¿Bueno o Malo?

Lo primero que hay que saber es que todo alimento de consumo humano es evaluado y testeado en sus diversas presentaciones para comprobar su calidad, valor nutricional, consistencia y cambios que puedan sufrir a la hora de pasar por el proceso de refrigeración. ¿Resultado? ¡Ninguno es igual a otro y cada uno soporta el frío de manera distinta!

Dicho de otro modo, hay productos que se llevan muy mal con la refrigeración y terminan perdiendo sabor, textura y hasta valor nutricional. Y ¿cuáles son esos productos? Veamos:

• Mayonesa: El problema de este producto es la descongelación, ya que luego de pasar por el freezer una mayonesa se convierte en una masa sólida sin apenas gusto ni textura.

• Verduras y vegetales: Alimentos con una gran cantidad de agua en su composición. Ergo, al congelarse se arruinan sus estructuras por los cristales de hielo que se forman y, en consecuencia, pierden su sabor y frescura.

DATO: Zanahorias cortadas, brócolis, guisantes, maíz, granos cocidos o pimientos, sí que pueden congelarse sin muchos problemas… ¡Siempre y cuando se envasen al vacío y bien sellados! Esto último, por cierto, sirve igual para las frutas, las cuales pueden ser disfrutadas post-refrigeración a modo de jugo sin mayores alteraciones.

• Pasteles o tortas: Estos alimentos se agrietan en la descongelación y, por eso, es preferible dejarlos en la parte media del refrigerador. Allí aguantan manteniendo su frescura original hasta por 4 días. Luego de eso sí que la humedad podría convertirse en un factor.

• Huevos: La clara es lo que mejor se conserva congelada. ¿Los huevos enteros, en su cáscara? Esos no. Lo mejor con este producto es dejarlos en ambiente o en la puerta de la nevera.

• Enlatados: Estos productos son un rotundo no a la hora de hablar de congelación. Mientras un alimento esté en su lata jamás debe entrar en el refrigerador. ¿Lo recomendable? Pues sacar la comida del metal, almacenarlo en recipientes aptos y, ahí sí, congelar.

Alimentos cocinados: De nuevo, se trata de un producto que únicamente tendrá una buena descongelación si se guarda en recipientes herméticos. De lo contrario, hasta en un riesgo de salud se podrían convertir, y nadie quiere pasar por eso en plena época de pandemia.