El confinamiento causado por el Covid-19 nos obliga a cambiar algunas cosas en nuestra rutina diaria para poder garantizar una buena dieta y, por tanto, mantener un óptimo estado de salud

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La pandemia de Covid-19 ha llevado a toda la sociedad a cambiar la forma de abastecerse de alimentos y provisiones, y, aunque parezca increíble, no todos tienen la habilidad de cómo hacer las compras de sus alimentos.

Frimaca, empresa dirigida por Mauro Libi Crestani, replica acá una serie de recomendaciones básicas elaboradas por el Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunidad Valenciana (CODiNuCoVa), en España, con la finalidad de poder disfrutar de una buena alimentación en tiempos de cuarentena.

Alimentos perecederos

La presidenta de CODiNuCoVa, Paula Crespo, no recomienda comprar grandes cantidades de este tipo de alimentos, pero existen algunos que perduran mejor que otros. “Nos encontramos con hortalizas que aguantan mucho y muy bien el paso del tiempo. Es el caso de la col, la coliflor, la col lombarda, las zanahorias y las cebollas. Descartaríamos de este listado el brócoli y también alimentos como la lechuga o los tomates”.

Sobre las frutas, Crespo destaca que la clave se encuentra en su proceso de maduración, lo que lleva a distinguirlas según su temporada. Por ejemplo, el proceso de maduración de las peras, las manzanas o los plátanos no concluye tras su cosecha, lo que hace que duren menos tiempo. Por esto, la asociación sugiere incluir en las compras frutas no climatéricas por su capacidad de durar más.

Alimentos no perecederos

Estos son más recomendables, sobre todo los que han sido procesados para alargar su vida útil.

“Productos que ya vengan cocidos como las legumbres o verduras en lata o envases de vidrio, que tienen además una fecha de caducidad a largo plazo, o los que se pueden comprar crudos, como legumbres secas o arroz”, aconseja Luis Cabañas, secretario de la organización.

Las latas y conservas de atún, sardinas o moluscos son otros de los alimentos no perecederos que se pueden añadir a la despensa porque su caducidad es lejana, no requieren de refrigeración y ocupan menos volumen.

Lácteos

“Se pueden comprar varios litros si han tenido procesos térmicos como el UHT, pero el problema es el espacio para almacenarlos. Lo mismo ocurre con las bebidas vegetales como las de soja, almendra o arroz”, manifiesta Cabañas, quien destaca que los lácteos fermentados como el yogur precisan de refrigeración.

Bollería, frutos secos y alimentos congelados

Durante la cuarentena provocada por el coronavirus la actividad física se reduce drásticamente, por lo que es recomendable reducir de forma considerable, o eliminar en lo mejor de los casos, los productos procesados de la bollería, y en su lugar ingerir snacks más saciantes como encurtidos o palomitas de maíz.

Sobre los alimentos congelados se recomienda que no sean precocinados, ni ricos en sal o cargados de grasa.

Por tanto, la carne y el pescado congelado, las verduras y frutas congeladas, son un buen sustituto del alimento fresco porque las propiedades nutricionales que contienen se conservan.

Higiene y seguridad en la cocina

Además de estos consejos, es vital mantener las mínimas medidas de higienes y seguridad en la cocina, como, por ejemplo:

• Mantener la superficie de limpia y desinfectada.
• Lavarse las manos antes de cocinar y mientras manipule alimentos crudos.
• Asegúrese de lavar bien todos los vegetales, verduras y frutas que vaya a consumir.