Congelar los alimentos es la forma más común de conservarlos por más tiempo, pero siempre se deben tener en cuenta una serie de elementos clave para lograr que este proceso se haga de la manera correcta y garantizar alimentos de calidad al descongelarlos.

Mauro Libi, presidente de Frimaca, reseña que cualquier producto puede ser congelado, lo que no implica que todo se deba congelar. Este proceso implica la congelación de las partículas de agua de cada alimento, por lo que algunos perderán propiedades físicas, e incluso sabor, al ser descongelados.

El proceso de congelación no afecta las propiedades nutricionales de los alimentos. Sin embargo, se recomienda congelar los vegetales y hortalizas antes de su cocción, pero se sugiere congelar las proteínas animales estando ya cocidas.

Mauro Libi resalta que congelar un alimento no impide su deterioro, solo lo detiene mientras estén en ese estado. Al ser llevado a temperatura ambiente, se deben cocinar pues retoman su proceso bacteriológico de descomposición.

Sobre el tiempo de congelación, varía de acuerdo al tipo de alimento, aunque lo ideal es que no pasen más de un año congelados. En cuanto a las carnes, embutidos, caldos y granos, no deben congelarse por más de 3 meses.

Antes de congelar tus alimentos, considera estos datos para que su conservación sea optima.