Comprar alimentos congelados en un supermercado puede convertirse en un riesgo

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Si bien es cierto que comprar los alimentos empaquetados o pre cocidos nos hace la vida más fácil en el exigente mundo de hoy, se deben tener en cuenta algunas consideraciones para comprar el producto que mejor conserve sus propiedades nutricionales.

Mauro Libi Crestani, presidente de Frimaca, te trae algunas consideraciones a tomar en cuenta al momento de comprar alimentos congelados.

Congelación y refrigeración de los alimentos

A menudo se cree que congelación y refrigeración son los mismo, pero esto es un error. Son dos sistemas diferentes de conservar los alimentos mediante el frío.

Mientras que la refrigeración conserva y preserva dificultando la proliferación de microorganismos a una temperatura de entre 3 a 5 ºC, la congelación almacena el alimento durante mucho tiempo a una temperatura de -18ºC.

La congelación convierte el agua de cada alimento en cristales de hielo, deshidratando el alimento temporalmente, lo que permite conservarlos por más tiempo. Además, impide la proliferación de microorganismos, ya que éstos no crecen en temperaturas inferiores a los -10ºC.

El punto de congelación de cada alimento varía según la cantidad de líquido que contenga, ya que no es agua pura. Contienen sales minerales, azúcar y proteínas, afirma Mauro Libi.

¿Cómo congelar correctamente?

El proceso de congelación de un alimento, así como su transporte, debe realizarse rápidamente, para que los líquidos se conviertan en cristales pequeños y conserven mejor la estructura del alimento.

Mientras más rápido se congele un alimento, mejor será su calidad al descongelarlo. Al congelar alimentos en casa se debe estar atento a los envases utilizados, ya que al congelar un producto éste aumenta su volumen.

Consejos para el hogar

• Lo primero es tener congelador y este debe ser de 4 estrellas, si es que queremos congelar, pero para conservar congelados basta con uno de 3 estrellas.
• Envolver el alimento, según sea más conveniente, para evitar quemar o enranciar algunas zonas.
• El papel transparente es adecuado para verduras y frutas, en cambio el de aluminio es para carnes y pescados.
• La carne debe congelarse siempre deshuesada y limpia.
• Los líquidos o zumos deben guardarse en envases plásticos, pero sin llenarlos al tope, ya que el volumen aumenta un 10% tras la congelación.
• El pan y la bollería se congelan muy bien. Debe hacerse cuando están aún bien tiernos y siempre envueltos. Conviene descongelarlos a temperatura ambiente durante un par de horas. Si es pan en rebanadas lo mejor es congelarlas separadas y envueltas también. Cuando el pan es descongelado al horno queda muy crujiente, pero se endurece al cabo de poco tiempo.
• No es conveniente congelar los productos de temporada ya que podemos disponer de ellos frescos, como ser los huevos, la leche y algunas frutas como peras y manzanas.
• En el caso de congelar huevos, hay que separar las claras de las yemas y guardarlas en bolsitas. A las yemas añadirles un poco de sal o azúcar.
• Si se congelan quesos duros, al cortarlos ya descongelados se desmigajarán.
• La nata se congela en porciones muy pequeñas y en recipientes cerrados herméticamente.

Alimentos y platos congelados

Mauro Libi aclara que no es lo mismo un alimento congelado de forma individual (como verduras, carnes, o pescados) que platos pre cocidos o listos para el microondas.

Es importante conocer la diferencia ya que los productos pre cocidos no constituyen la mejor de las dietas. No hay nada mejor que los alimentos frescos y su consecuente preparación en casa, sin importar cuánto tiempo tarden en cocinarse.